¿Te sientes atrapada entre quejas y deseos de cambio, pero no sabes por dónde empezar? Si estás lista para tomar las riendas de tu vida y dedicarte tiempo a ti misma, estás en el lugar adecuado. Te ofrezco tres simples pasos para transformar tu mentalidad y tu día a día:
1. Adiós a las quejas: Toma el control desde el principio. Es hora de dejar de culpar a las circunstancias y asumir el control. Quejarse puede parecer fácil, pero ¿realmente quieres seguir en ese ciclo de negatividad? Reconoce que la queja es una elección y opta por la acción:
- En lugar de quejarte de la falta de tiempo para hacer ejercicio, programa una rutina de entrenamiento de 20 minutos en casa tres veces por semana.
- En lugar de lamentarte por no poder dedicar tiempo a tus pasatiempos, reserva una hora cada noche después de que los niños se acuesten para leer, pintar o practicar la guitarra.
- En lugar de quedarte atrapada en la negatividad de la rutina diaria, crea una lista de tareas pendientes y priorízalas, comenzando por las más importantes para ti.
- Si te sientes estancada en tu trabajo actual, investiga cursos en línea o programas de capacitación que puedan ayudarte a adquirir nuevas habilidades y avanzar en tu carrera.
- Si tus relaciones personales te están causando más estrés que alegría, establece límites saludables comunicando tus necesidades o simplemente aléjate.
- Si sientes que te falta emoción en tu vida, prueba algo nuevo cada semana, como una receta de cocina diferente, una clase de baile o un paseo por un lugar que nunca has explorado.
3. Vive con propósito: Encuentra significado en cada paso. Descubre tu propósito y haz que cada acción esté alineada con él. No se trata solo de hacer cosas, sino de hacerlas con pasión y sentido. Encuentra lo que te mueve y vívelo en cada momento:
- Identifica tus valores y encuentra maneras de integrarlos en tu vida diaria, como dedicar tiempo a enseñar a tus hijos sobre la importancia de la generosidad y la compasión.
- Dedica tiempo cada semana para contribuir a una causa en la que creas, ya sea como voluntaria en un refugio de animales o donando a una organización benéfica que apoye a familias necesitadas.
- Establece metas personales y profesionales claras, y trabaja en pequeños pasos hacia ellas cada día, celebrando tus logros y aprendiendo de tus desafíos.
Hagamos un ejercicio práctico:
¿Quieres empezar a hacer cambios tangibles hoy mismo? Comienza por transformar tu forma de hablar. Reemplaza “tengo que” por “elijo”, así reconoces tu poder de elección. Agradece las oportunidades que tienes, transformando “tengo la oportunidad de” en “quiero”. Verás cómo este cambio de lenguaje despierta una nueva energía en ti.
En resumen, dejar de quejarse y actuar es una decisión que solo tú puedes tomar. Transforma tu mentalidad y tu forma de hablar, y verás cómo tu vida se llena de satisfacción y logros.
¿Qué estás esperando? ¡Es hora de empezar a vivir según tus propias reglas!
Ericka.